martes, 28 de junio de 2011

Las Aguas Saborizadas llegaron para quedarse

Cuando el cuerpo necesita incorporar agua se manifiesta habitualmente con una sensación: la sequedad de las mucosas de la boca y garganta. Esto significa que la sed ha hecho su aparición, para avisarnos que debemos reponer el líquido necesario para conservar la vida.

La sed es una sensación que se percibe cuando las células de nuestro cuerpo están con un déficit de agua. Cuando por cualquier razón las células del cuerpo pierden agua, modifican su tamaño y se achican. O sea comienzan a deshidratarse, de allí se activa el hipotálamo y este emite órdenes al cerebro y de esa forma se activa la sensación de sed.

Cuando las células pierden agua, con ella se movilizan los electrolitos dentro y fuera de las mismas y se modifica el equilibrio de esos sistemas, el sodio en todo esto, cumple un rol fundamental y su pasaje a través de las membranas es determinante para que ocurran estos cambios. Cuando eliminamos agua se aumenta la concentración de sales fuera de la células (líquido extracelular) y se altera el equilibro dentro (líquido intracelular) y fuera de las células. El organismo para normalizar dicho fenómeno emite una señal: la sed y es en ese momento que nosotros utilizamos el agua.

Pero no debemos llegar a tener sed para tomar agua, debemos (y esto está bien incorporado en la gente) tomar agua antes que aparezca la sed. Debemos por lo menos tomar entre 1,5 y 2 litros de líquidos por día. Por eso el éxito de alguna manera, de las aguas saborizadas, es como si tomáramos agua con sabor y muy pocas calorías.

Las Aguas Saborizadas son Negocio

En la competencia participan no solamente las empresas tradicionales de bebidas, sino que cada vez llegan hasta las cadenas de supermercados.

Más de 30 empresas entre grandes, medianas y pequeñas, tienen marcas registradas para comercializar agua envasada en el país. El negocio es tan atractivo, que los supermercados e hipermercados manejan marcas propias para competir en este segmento, el cual se perfila como uno de los más vendedores en los próximos años.

Según la firma investigadora de mercados Radar, en Colombia al año se venden 40.180 millones de pesos en aguas envasadas y para el cierre del 2006 se proyectan 44.261 millones de pesos. Para algunos empresarios, a pesar de tratarse de un mercado dinámico es un negocio que aún puede crecer mucho más, pero para ello es fundamental la innovación.

Es por ello que la competencia de las empresas no es sólo con la presentación del producto. Ahora el agua viene con gas y sabores, que además de cambiar el color y el sabor, cumplen con la promesa de no alterar la naturalidad del agua.

Miguel Ernesto Cuadros, vicepresidente de Talento Humano de Carulla Vivero, comenta que Colombia es un país competitivo en América Latina para el mercado del agua, máxime si se tiene en cuenta que no en todas las partes del país se puede tomar confiablemente de la llave de tubo. Carulla lanzó a principios de este año agua con sabor de marca propia, con la cual entró a competir con Dasani de CocaCola (la cual arrancó en octubre del año pasado) y con Brisa Spa, que se está vendiendo hace unas semanas.

Para Carulla, a pesar de que el agua con sabor es un mercado relativamente nuevo en Colombia, las estadísticas de consumo indican que es atractivo para seguir impulsando el consumo en el país. Según Cuadros desde el 16 de febrero del 2006 cuando se lanzó la marca propia de agua saborizada se han vendido 350.000 unidades, distribuidas en cuatro sabores.

Para los voceros de Bavaria, la categoría de aguas tiene una particularidad y es que el 75 por ciento del volumen la hacen las presentaciones en bolsas que son las más económicas. Estas presentaciones se caracterizan por su bajo precio y están directamente relacionadas con el poder adquisitivo de la mayor parte de la población. No obstante, destaca que las aguas con gas y con sabor están generando el crecimiento y expansión de la categoría.

Para las directivas de Bavaria el consumo de agua en Colombia es todavía muy bajo frente a otros países del mundo. Colombia tiene un consumo per cápita aproximado de 15 litros al año frente a 26 en Argentina y 45 en Uruguay, esto significa que hay mercado por desarrollar. Investigadores opinan que el creciente número de registros en la Superindustria para comercializar agua, es un indicador de que en los próximos años la ‘guerra’ de las empresas con productos será más fuerte y los precios se convertirán en el mayor atractivo para motivar el consumo.

Estratos altos consumen menos agua


Un estudio de Radar indica que si bien es cierto que el agua envasada se consume en todos los estratos y en todas las ciudades del país, en los estratos medios y bajos es donde se concentran los mayores consumidores. De ahí que la apuesta de las empresas sea innovar en sus propuestas para llegar a nuevos segmentos. Según las estadísticas de esta firma investigadora, el 51 por ciento de los ingresos por la venta de agua envasada provienen del estrato medio, el 40 por ciento del bajo y sólo un 9 por ciento de los estratos altos.

Los mayores consumidores del producto están en montería, Villavicencio y Barranquilla, mientras que Bucaramanga, Medellín y Cali son, según Radar, las ciudades donde menos se consume agua envasada. Para los empresarios que le apuntan a esta industria, el lanzamiento de diferentes propuestas es fundamentarl para lograr aumentar el consumo per cápita que en Colombia es aproximadamente de 15 litros al año, mientras en Argentina es de 26 y en Uruguay de 45.

Las Grandes empresas no Desean quedarse afuera

La multinacional Coca Cola se lanzó ayer a competir en el mercado de las aguas minerales saborizadas, un segmento donde ya intervienen dos rivales de peso como son Danone y Quilmes. Se trata de un mercado aún chico, que representa no más de 5% de las ventas totales de las bebidas sin alcohol (unos 30 millones de pesos mensuales). Pero tienen un margen astronómico para expandirse: según AC Nilsen, el consumo de aguas minerales subió 39,4 por ciento durante 2004.

Aguas Saborizadas en Plena Pelea por el Mercado

Tal fue la sorpresa que la misma Coca Cola (luego del fracaso de su producto Nativa) sólo atinó a demandar a Danone por el diseño de la etiqueta de las aguas Ser. Según la compañía la inclusión de figuras de frutas en la etiqueta no respetaban las normas de Lealtad Comercial. La proporción de jugo de fruta no superaba el 5% de la bebida y la Ley de Defensa del Consumidor exige que una bebida tenga por lo menos 25% de jugo natural para poder llevar la imagen de la fruta en la etiqueta.

La "intervención" del producto podría tener un efecto contundente: sacar del mercado una bebida recién lanzada, justo durante los meses estivales. El fuerte incremento en las ventas de las saborizadas es visto como una amenaza para los negocios de gaseosas y jugos en el país. Los analistas del rubro aseguran que las saborizadas le quitan más clientes a las gaseosas que a las propias aguas minerales, y que hoy le pisan los talones a los que, hasta el momento, ocupan el segundo puesto en ventas de bebidas: los jugos.

Danone presentó una medida cautelar y sus abogados señalaron que una tercera competidora, Pepsi, había lanzado anteriormente un producto que también tiene limones en la etiqueta (Pepsi Twist), pese a que tampoco cumplía con el requisito de tener 25% de ese jugo. Finalmente Danone logró sortear la dificultad y la bebida Ser siguió su camino al éxito de ventas pero tuvo que realizar una salida compulsiva del mercado de las partidas de Villa del Sur (sabores manzana, pomelo y lima limón).

Cuidado Aguas Saborizadas en Mal Estado

Una partida de aguas saborizadas Villa del Sur Pomelo y Manzana fue retirada hoy del mercado tras comprobarse que presentaban alteraciones que le ocasionaban mal sabor, informó el Gobierno porteño.

La Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) descubrió que la partida de la bebida de Villa del Sur, que pertenece a de la empresa Aguas Danone Argentina, tenía alteraciones de las propiedades físicas.

La Secretaría de Salud porteña informó en un comunicado que la ANMAT, "a través del Instituto Nacional de Alimentos, recibió varias denuncias vinculadas con la partida de la bebida Villa del Sur Pomelo elaborada entre los días 16 de octubre y 27 de noviembre y que tenían fecha de vencimiento el 16 de abril y 27 de mayo de 2005".

El organismo de salud agregó además que esas denuncias también comprendían a la bebida "Villa del Sur Manzana con fecha de vencimiento el 02 de mayo de 2005".

Como consecuencia de esas acusaciones, "la ANMAT, junto con las autoridades sanitarias jurisdiccionales competentes, realizaron la investigación pertinente y encontraron una alteración de las propiedades físicas y organolépticas, presencia de gas y mal sabor”.

Por tal motivo, se informó que "la empresa inició la recuperación de las partidas de esas bebidas en todo el país, bajo la supervisión de las autoridades sanitarias".